Marc Lesan: “En Internet nos falta contenido marronero en catalán”
Hablamos con Marc Lesan, un joven barcelonés de 19 años que se ha erigido como una de las voces emergentes entre los creadores de contenido en catalán en Internet.
Háblanos de ti.
Tengo 19 años y he vivido casi toda mi vida en Nou Barris, Barcelona. Yo era el típico que hacía bromas en el instituo y pensé que sería buena idea exportarlas a Internet. Me he criado en la cultura de Internet, desde los tres años que he tenido un ordenador porque mi padre y mi tío son muy frikis, y es por esto que hice el salto al contenido online, a Youtube. Comencé con algunos sketches en castellano hasta que en abril de 2020, en plena cuarentena, me encontraba en el sofá de casa viendo Zona Zapping y me pregunté: “¿Qué puta mierda es esta?”. Fue entonces que decidí hacer un vídeo en el que explicaba que por cosas como esta los jóvenes hablaban cada vez menos en catalán, cosa que se nota con el contenido que circula en Internet. A partir de ahí descubrí la burbuja del catalán en Internet.
Pero tú antes producías contenido en castellano, ¿no?
Mientras hacía aquel vídeo reflexioné, pensé que quizá era un hipócrita porque me quejaba del poco contenido en catalán que había en Internet mientras que yo en mis redes no contribuía demasiado a ello porque casi todo lo que colgaba estaba en castellano. Entre eso y que después me contactó Bru Esteve para decirme que me querían fichar por Canal Malaia, me planteé hacer un cambio. Y ahora me dedico a producir contenido audiovisual en catalán.
¿Qué veías tú antes de ser creador de contenido en redes?
Veía el K3 en casa de la abuela, o el 3XL, cuando me dejaba la abuela, algunos vídeos de Youtube… Todo lo que veía en la tele era en catalán, con la excepción de alguna serie que sí que veía en castellano porque entonces ya no se hacía, como me pasó con Shin Chan, pero en Internet todo lo que consumía estaba en inglés o en castellano. Ha sido muy difícil para mi encontrar alguna cosa en catalán para mi, a parte de JClic.
¿Quienes son tus referentes, en general?
De pequeño miraba Wismichu, Auronplay… Y un referente que me marcó mucho y que creo que tendré de por vida son los Vengamonjas, con los que he tenido el placer de trabajar. Flipé cuando me lo ofrecieron, pues soy su fanboy. Ellos eran mi principal referente castellanohablante. Pero sí es verdad que la mayor parte del contenido que consumo es en inglés. Esto es un retrato de cómo el hecho de que todo esté interconectado ha dejado en desventaja las lenguas más pequeñas.
¿Quienes son estos referentes en inglés?
Un chico que se llama Jay Foreman, que hace unos vídeos didácticos muy graciosos. Es a quien más me intento parecer. Y después un tipo que se llama Pyrocinical que también me parece bastante gracioso.
¿Y los de la comunidad catalana?
Desde que estoy en esta burbuja del mundo audiovisual en Twitter tengo muchos referentes en catalán. Toda la gente de La Sotana, me parecen muy graciosos. Joel Díaz. Para las prácticas de la universidad había que hacer un directo a pie de calle y me quería inspirar en él y los Vengamonjas para hacerlo. Quería crear mi versión cutre de enfant terriblismo que ellos hacen genial, pero que yo no sé hacer. Toda la gente del entorno de Comedy Gold o de El Soterrani, la Charlie Pee, Modgi… En el ámbito audiovisual me hacían gracia los Bricoheroes, Godai Garcia…
¿Y algún referente entre los creadores emergentes?
En catalán tenía pocos referentes jóvenes. Había poquita gente, a parte de los que formaban parte de Youtubers.cat, y no me había llegado contenido del grupo impulsor de Canal Malaia. Participar de ello me permitió conocer más gente de la comunidad catalana de creadores, pero también personas como Drulic, de Youtubers.cat. Cada uno tiene cositas que vas incorporando a tu manera de hacer.
Así pues, parece que Canal Malaia ha ayudado a cohesionar la comunidad creadora en nuestra lengua ¿no?
Ha tenido un impacto muy guay. Es una cosa que tarde o temprano tenía que aparecer. Lo que me parece más interesante de la iniciativa es lo de hacer red entre creadores, porque de aquí pueden nacer colaboraciones, proyectos compartidos, podcasts… Esto puede provocar un efecto bola de nieve. Ahora bien. Todos tenemos capacidad de producir contenido. Hasta un mindundi como yo con un micrófono puede contar algo al mundo. Esto debería ser positivo para el catalán, pero también tienes que vigilar porque puede haber más contenido mediocre.
Y para acabar, Marc, me gustaría que me dijeras qué es lo que echas de menos en la comunidad de creadores en lengua catalana…
Cuando se hace contenido en catalán se habla mucho de la lengua o de la independencia, en fin, de cosas solemnes, pero se habla demasiado de cosas mundanas. Y echo de menos más beef [un término inglés para referir polémica entre usuarios en redes]. Por el vídeo que hice sobre Racó Català recibí una vídeorespuesta, por ejemplo. Falta contenido más marronero, un poco de salsa rosa. La Juliana Canet ahora lo hace en el APM… Hace falta hacer el mismo uso de las redes que hacen los usuarios que producen en castellano o inglés.